Buenos Aires SOS

Buenos Aires Sos.- 20 de mayo 2010,. (Por Alejandra Cassinelli).- Una vez más, alumnos, padres, docentes salieron de las aulas para reclamar por mejoras edilicias.

La comunidad educativa del centenario colegio Mariano Acosta, del barrio de Balvanera, compuesta por más de 3000 alumnos del nivel primario, secundario y terciario, este mediodía abrazó el edificio contra «el vaciamiento de la escuela pública».

Ante una masiva concurrencia Tomás Lerner, integrante del Centro de Estudiantes del Mariano Acosta, sostuvo  «el alarmante deterioro de la parte histórica del edificio, existiendo peligro de derrumbe de los balcones, hay filtraciones en los techos y los únicos tres ascensores que tiene la escuela, no funcionan».

Los alumnos recordaron cuándo, en 2007, se cayó el cielorraso de una de las aulas de la primaria, algo que pudo haber sido una tragedia. A partir de entonces, la alumnos y docentes  deambularon por diferentes facultades, mientras se arreglaba el colegio.Pasados varios meses, los alumnos, luego de una serie de luchas por la recuperación de su edificio, vuelven a Urquiza y Moreno, sólo unos días más tarde, se cae otro techo, esta vez de uno de los pasillos, conocido como Siberia.

Mientras tanto, la rectora, Raquel Papalardo, explico que «en realidad hace falta  una reestructuración integral del edificio, ya que hasta este momento sólo se trató de parches», para corroborar lo dicho sostuvo que «el aula magna, restaurada en el año 2005, se cayeron partes del friso y, además, tiene filtraciones en la pared»

Si uno visita la escuela,  puede observar, sin ser ningún perito en la materia, que hay cornisas, que dan al patio, que se están cayendo y de las tres escaleras que existen, dos están clausuradas.

La rectora,Raquel Papalardo, se manifestó muy preocupada debido «a la demora de la resolución del problema que conlleva cuestiones de seguridad del edificio».

Esto también debería ser preocupación de las autoridades porteñas, como parte del bicentenario, ya que se trata de un edificio que es parte del patrimonio histórico de la ciudad de Buenos Aires y fue fundado por Sarmiento, entre otras cosas.